La llegada de las nuevas tecnologías ha ampliado el abanico de posibilidades para realizar el acto sexual y para que juegos sexuales son muy necesarias para propiciar los encuentros entre los amantes.
Antes sólo existían los bares o discotecas para contactar o ligar con un desconocido/a, ahora internet ya se lleva la palma para contactar cuando tienes ganas de sexo o simplemente como en el caso que nos ocupa, para practicar el voyeurismo o cualquiera de sus variantes.
El dogging se puede considerar una parafilia y consiste en practicar el acto sexual con un desconocido o con tu pareja, en algún lugar donde existe la oportunidad de la existencia de testigos de ese acto. Los que se consideran adeptos a esta disciplina dicen que tienen un subidón de adrenalina, incluso las parejas más conservadoras.
Como los swingers los que practican el dogging cuentan con normas y reglas que se deben cumplir estrictamente.
Internet ha permitido que los usuarios de esta práctica y a través de foros y páginas especializadas, estén plenamente enterados de este tipo de eventos, es decir que se emplazan en sitio, fecha y hora a los lugares de encuentro, incluso establecen las normas de cada uno, como por ejemplo: cuantos voyeurs quieren que haya, a que distancia se deben colocar y en que grado quieren que participen.
Por normal general el lugar más utilizado para la práctica del dogging, es en el propio coche y se realiza todo un ritual en el mismo, para indicar a los voyeurs hasta donde les dejan implicarse.
Por si es de vuestro interés os explicaré alguna de las normas:
- Si se accionan las luces intermitentes externa, indica que en ese coche va a haber acción.
- Si abren la luz interna viene a ser una invitación a los de fuera para que vean lo que hacen dentro, con el morbo añadido de ser observados como lo hacen y para los voyeurs, mirones y hasta parejas que hacen sexo, viendo a las otras teniéndolo, aquí la imaginación es libre siempre y cuando cumplas las normas.
- Si el coche donde hay acción baja las ventanas o bien entreabre las puertas, eso indica que permiten que se acerquen los mirones hasta el punto de tocar chica o ver mejor la escena.
- Si una de las puertas se abre por completo es una clara invitación a un trío o orgía, siendo decisión del voyeur si quiere mirar o participar.
Para algunos esta práctica resulta depravada, pero hay muchos que consideran que es una buena forma de salirse de la rutina, los hay que incluso fingen no ser pareja y no conocerse para elevar el morbo al quedar en los foros y webs.
También hay parejas que recurren al anonimato del dogging, para llevar a cabo la fantasía de hacer un trío u orgías con personas desconocidas, o simplemente para sentirse observados cuando tienen sexo.
Dar el paso de permitir el participar en la sesión de sexo a una persona sin conocerla de nada, puedo pasar de disfrutar de un poco de morbo a complicarse por culpa de esta participación.
Ahora mi compañero Jose me dice que esto del dogging, también se hacía con la excusa de pasear el perro, por eso deriva la palabra, yo miraré de consultarlo y si hallo algún relato sobre esta práctica ya lo publicaré.
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